A través de un estudio, Vía Célere ha podido obtener una serie de conclusiones que definen el perfil comprador medio de vivienda en España. La radiografía de esta figura, elaborada a través de analizar clientes a lo largo de 2019, muestra un perfil sin hijos que desea adquirir su primer hogar en propiedad para mejorar las condiciones de su actual vivienda.
Atendiendo a qué motiva el hecho de adquirir una vivienda, el primer motivo es la mejora de la calidad de vida y la búsqueda de un mejor espacio, como atestiguaron el 61,90% de los compradores. El cambio de ubicación (23,1%) y el estar más cerca de familiares o amigos (6,4%) fueron las otras razones principales.
La mayoría de los casos analizados por Vía Célere (un 53,2%) afirmaron no haber realizado previamente una compraventa de vivienda. Un 22,7% aseguró que su nueva compra suponía una reposición. El porcentaje de clientes que realizó la gestión con el objetivo de adquirir una segunda residencia supuso un 14,3%, mientras que el 8,8% lo hizo como inversión. Solo un 1% afirmó destinar el activo a una actividad profesional u otros usos.
Familia y vivienda
Al analizar la situación familiar, el segmento más numeroso del estudio (36,8%) corresponde a aquellas personas que no tenían ningún hijo. Quienes contaban con un descendiente suponen el 25,7%. Los otros segmentos corresponden a aquellos que tenían 2 hijos (29,3%), 3 (7,1%) y más de 3 (1,1%).
La tipología de vivienda se ha visto afectada por el tamaño de la familia. Las casas de 3 dormitorios fueron las favoritas de los compradores, ya que fueron requeridas por el 46,2%. Un 13,1% prefirió las viviendas de 4 habitaciones y un 23% las de dos, mientras que un 3,2% indicó que buscaba una vivienda de un dormitorio o menos y un 5,3% quería cinco o más. Solamente un 4% aseguró que buscaba indiferentemente una casa de dos o tres dormitorios y un 4,1% querían tres o cuatro. Además, un 1,1% de los clientes de Vía Célere aseguraron buscar su vivienda independientemente del número de dormitorios.
